Jim Sturgess: "Creí que mi primera película sería la única".

Tiene casi 35 años (los cumple el 16 de mayo), pero parece muchos menos, y en la pantalla ya ha enamorado a Evan Rachel Wood -en el magnífico musical Across the Universe, contado (y cantado) con canciones de los Beatles) y a Anne Hathaway (One Day: Siempre el mismo día). Jim Sturgess (pronúnciese Stéryes) protagoniza ahora junto a Kirsten Dunst Un amor entre dos mundos, una película romántica ambientada en dos planetas separados por la fuerza de la gravedad. Además, en julio estrenará La mejor oferta, cinta presentada en el pasado Festival de Berlín donde el actor –dulce y amabilísimo- nos habló de sus inquietudes.

Usted nació en Londres y creció en Surrey. ¿De dónde cree que le viene su creatividad? No estoy seguro. Probablemente del aburrimiento (ríe).Yo vengo de una ciudad a las afueras de Londres y no teníamos ni cine, ni McDonalds… nada. Así que esa era una forma de encontrar nuestra propia diversión, y así es cómo me metí en la música. Éramos chicos que salíamos por ahí, yo montaba muchísimo en monopatín…

¿Todavía lo hace? Sí, bueno… (Ríe). Pero, ¿sabes qué? Ahora soy tan consciente de que me puedo caer y romper un tobillo que me da miedo (sonríe), y ya no soy tan bueno como antes. Pero era una forma de matar el aburrimiento, y con 15 años monté una banda con mis amigos que, de hecho, se convirtió en mi vida: escribir música y salir con mis amigos. Pero aunque nos lo pasábamos fenomenal, trabajábamos duro, y todavía hoy conservo esa mentalidad. Lo hago porque me encanta, pero no significa que no tenga que trabajar duro.

Sí, supongo que sí. La verdad es que no sabía muy bien qué esperar. Pero ha sido increíble. Nunca lo planeé. Caí en Across the Universe a través de la música y también de la interpretación, pero entonces pensé que solo haría esa película, que sería una experiencia increíble y ya. Eso era suficiente para mí y pensé que sería la única (ríe). Todavía me sorprende verme aquí.

Pues ya ha hecho bastantes. 21 Black Jack, con Kevin Spacey; Camino a la libertad, a las órdenes de Peter Weir, El atlas de las nubes… Y también Un amor entre dos mundos. ¿Qué tal esta experiencia? Creo que hice Un amor entre dos mundos como reacción a Camino a la libertad, que fue interesantísimo, pero muy duro. Pasamos un frío increíble rodándola, y luego muchísimo calor en Marruecos… Y hacer Un amor entre dos mundos fue divertido, pero también brutal. Pensé: «Es una gran historia de fantasía, un cuento de hadas, una historia de amor, muchos efectos especiales, justo lo contrario de lo que acabo de hacer… Y además está Kirsten Dunst, y el director (el argentino Juan Solanas), es un tío increíble». ¿El resultado? Una experiencia magnífica.

Todavía recuerdo en Across the Universe la escena en la que canta «Girl», con una voz preciosa, muy dulce. Por cierto, ¿cuándo fue la primera vez que le dijeron que era usted del estilo de Paul McCartney? (Ríe). Es verdad que me lo han dicho mucho después de aquel filme. No sé si será verdad.

¿Ha pensado en grabar un disco? Desde luego, todavía compongo y toco. La música sigue formando gran parte de mi vida.

En el Atlas de las nubes interpretaba muchos personajes, y con un reparto lleno de estrellas. Sí, aparezco en seis historias distintas con igual número de personajes. Fue algo muy extraño y una experiencia increíble. Me siento muy orgulloso de formar parte de una película tan ambiciosa, que, además, me gusta mucho. Ya la he visto varias veces y cada vez me gusta más.

Por último, ¿se ha planteado instalarse en Hollywood? Hmm. No lo sé. Siento que vivo en muchas partes, porque me muevo mucho entre Londres, Nueva York y Los Ángeles. Esos tres sitios son los principales, pero ya sabes, luego me mandan a otras partes del mundo a rodar… Pero siempre vuelvo a Londres porque ahí están mi familia y mis amigos. Esa es mi casa.

GLORIA SCOLA