domingo, 6 de julio de 2014

La madre del videoclip

Hoy se cumplen 50 años del estreno en Londres de la primera película de los Beatles, 'A hard day's night', una cinta revolucionaria en el género musical dirigida por Richard Lester

Un inconfundible guitarrazo de la Rickenbacker como primer acorde. "Ha sido la noche de un día duro, y he estado trabajando como un perro./ Ha sido la noche de un día duro, y debería estar durmiendo como un tronco". Cuatro jóvenes músicos corren por las calles perseguidos por sus fans. En la huida, George Harrison se precipita al suelo y arrastra a Ringo Starr. Es un accidente real. Pero no pasa nada. Los cuatro ríen. Está comenzando A hard day's night, la primera película de los Beatles, a los sones de la canción del mismo nombre compuesta por John Lennon a última hora. Ringo dio el título, La noche de un día duro, en español Qué noche la de aquel día. Y llegó al cine una película revolucionaria, que influyó en el nacimiento de los vídeos musicales. Una cinta que enseñó al mundo las imágenes de la explosión de la beatlemanía, fenómeno del que John Lennon en una entrevista aseguró que "no puedo definirlo, muchos ya lo han intentado. Yo no lo haré. Dejaré que lo hagan los psicólogos. Y lo harán mal". Hoy 6 de julio la película cumple 50 años (un mes después se publicó el disco homónimo, el tercero de la carrera de los Fab Fours) desde que se estrenó en el London Pavillion de la capital inglesa con Piccadilly Circus completamente colapsado.

Elvis Presley hacía películas y John, Paul, Ringo y George también querían probar en el séptimo arte. United Artists propuso la idea al representante de los Beatles, Brian Epstein. La UA estaba dispuesta a dar el 25 por ciento de los beneficios y vieron con sorpresa (y agrado) que aceptaban un 7,5. Epstein firmó un contrato para tres películas. Y fue Richard Lester -director de Los tres mosqueteros, Golfus de Roma o Robin y Marian- quien se ofreció a dirigir la película, recomendando a Alun Owen como guionista. Éste, incorporado a una de las giras del grupo, descubrió el acoso de los fans y la bunkerizada vida de cuatro jóvenes en edad de hacer las cosas propias de los veintipocos años. De esa experiencia salió una película que, con una modesta inversión de poco menos de 200.000 libras y rodada en blanco y negro ante el alto coste del color y el miedo de la UA a no recuperar la inversión, llegó a obtener dos nominaciones a los Oscar: mejor guión original y mejor música original. La revista Time la coloca en tres las 100 mejores películas de todos los tiempos. Y su banda sonora ocupa el puesto cuarto entre las 25 mejores de todos los tiempos según la revista Rolling Stone. Los temores de la United Artists eran, aunque lógicos, infundados. Sólo en cines la cinta recaudó más de 12 millones de dólares.

Fue rodada entre el 3 de marzo y el 23 de abril. Los Beatles acababan de regresar de su primera gira por Estados Unidos, llegando a concitar el 9 de febrero ante la tele a 73 millones de americanos en su aparición en el programa de Ed Sullivan. El rodaje fue para los cuatro una vía de escape en una encorsertada existencia que les llevaba de habitación en habitación de hotel. Durante ocho semanas, y justo antes de emprender otra gira, esta vez por Escocia, los Beatles se enfrentaron a unas pautas disciplinarias a las que no estaban acostumbrados. Debían madrugar para estar cada mañana a las ocho en los estudios Twickemhan, en las afueras de Londres donde se grabó la mayor parte de la cinta. Aún así, el ritmo de trabajo distaba mucho del ajetreado día a día de los músicos. Hubo mucho tiempo libre en el rodaje y llegaron a ser visitados por Dick Van Dyke y Julie Andrews, que en esos mismos estudios estaban rodando entonces Mary Poppins.

El guionista supo plasmar en la película la arrogancia de Lennon, la amabilidad e McCartney, la melancolía de Harrison y la timidez de Starr. El periódico Daily Mirror en su crítica de A hard day's night vio a unos Beatles "descarados, irreverentes, divertidos e irresistibles". El mundo entero iba a conocer de primera mano cómo eran esos cuatro jóvenes que estaban conquistando el mundo y liderando una revolución generacional.

Ahora, para celebrar los 50 años se ha planeado el estreno de la película restaurada bajo el título A hard Day's Night 50th Anniversary Restoration, y se proyecta en el BFI Southbanck de Londres desde el pasado viernes hasta el día 17. En Blu-Ray y DVD se venderá desde el 21 de julio.

Las canciones de la banda sonora formaron la cara A del disco homónimo, el tercero de estudio de la discografía beatle, publicado sólo cuatro días después del estreno de la cinta. Fue el primer disco del grupo que contenía exclusivamente material original sin versiones de otros cantantes. Además fue el único trabajo de la corta pero inmensa trayectoria del cuarteto de Liverpool en el que todas las canciones pertenecen al dúo Lennon-McCartney, aunque con preponderancia del primero en la autoría. El LP contenía en su cara A temas significativos como el propio A hard day's night que abría el disco, And I love her o Can't buy me love. Alcanzó el número uno de las listas británicas y desbancó al anterior de sus discos, With the Beatles. En la cúspide permaneció 21 semanas de las 38 que se mantuvo en las listas.

En el momento álgido de la beatlemanía, los fans les perseguían, el mundo les admiraba y la inmortalidad les esperaba. Nadie podía imaginar que tan sólo les quedaban por delante seis años de carrera. ¡Pero qué seis años!

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